El Big Data es un término con el que cada vez estamos más familiarizados. Independientemente de cuál sea nuestra actividad laboral, el témino anglosajón se está convirtiendo en uno de los aspectos a los que más atención están prestando las empresas y las organizaciones en la actualidad.
Para conocer la importancia del Big Data en tejido empresarial hay que conocer su significado, el origen, la evolución y el valor añadido que aporta tanto a empresas como a particulares.
Desde el origen de los tiempos, la raza humana
siempre ha tenido la necesidad de recopilar/almacenar
todo tipo de información que tenía a su alcance. Pero el Big Data es algo
más que la mera recopilación de información. Alana Rincón, Directora de
Innovación y Personas de Nexian, en su
artículo el ‘Big Data, la herramienta que está
cambiando la relación entre las personas y la tecnología’, define el
término como “la anticipación a las
necesidades de la organización y lograr una planificación óptima de sus recursos
humanos”.
¿Sabemos cuál es el origen del Big Data? Todos los autores coinciden en situar su
origen a comienzos del siglo XXI, en el año 2003, en Google. Cuando Sanjay Ghemawat, Howard
Gobioff, and Shun-Tak Leung publicaron el estudio del sistema de ficheros
distribuidos que habían desarrollado, el Google File System (GFS).
Por lo tanto, una vez que conocemos la definición
y el origen del Big Data, podemos comprender el valor añadido que aporta a las
empresas y organizaciones. Este valor añadido se plasma en las empresas, a la
hora de tratar a sus clientes de forma personalizada, teniendo en cuenta
todas las particularidades que se han ido recopilando desde que se produjo el
primer contacto, con el fin de satisfacer las mismas de una forma óptima y
ágil.
Cabe destacar que el Big Data aporta valor añadido no solo a las empresas y organizaciones, sino que también la sociedad en sí se ve beneficiada por su influencia e importancia recibiendo respuestas más específicas y personalizadas.
Sergio Bedia
Analista Comercial